8 jun 2011

La Belleza, la naturalidad en un mundo plastificado.

Existen varios factores que alimentan la atracción hacia algo en concreto; algunos pueden ser el medio visual para el arte, la acústica para la música, el aroma para el olfato y muchos otros. Pero sin embargo hay uno que predomina sobre los demás, o al menos está muy valorado en estos tiempos, y es la Belleza. Pero la Belleza es algo simple y complejo a la vez, claro y obtuso. Abarca desde un concepto general hasta uno particular. Y de esto modo lo veo yo.



Como he mencionado anteriormente, la Belleza es simple pero compleja  a su vez de forma unísona. Lo que para una persona es hermoso para otra puede ser totalmente horrendo. La Belleza es esclava de la opinión personal y del concepto contemporáneo. Si hoy la belleza común se halla en figuras altamente estilizadas, piernas largas y miradas provocativas; en otras épocas ha sido totalmente distinto.
Pero no considero que se deba seguir un canon establecido por la sociedad, el cual la masa suele seguir por miedo a ser distintos, rechazados, e incomprendidos. La Belleza ha de ser como preferencia personal sin importar las generalidades que aportan nuestro medio social. El cual intenta presentarnos un ideal de bello mediante sus herramientas mas mortíferas; las modas, los anuncios y la televisión.

¿Cuantas veces me habrá pasado que al mirar por la calle chicas que son definidas como "guapas" las habré cualificado como indiferentes? Muchas, sin duda alguna. Y esto se debe porque para mi la belleza es totalmente contradictoria con la perfección. Si una persona tiene todas las cualidades acaba por no destacar en nada, lo que lo transforma en un todo que a la vez es nada. Quiero decir, que al tener todo lo bueno hace que esa complejidad acabe formando una simpleza. La cual acaba por aburrir al no tener nada que analizar en ella, pues todo está resuelto.
Será por este pensamiento la razón por la que siempre me atraen chicas "normales" pero con rasgos que son invisibles al resto de los espectadores. Yo las llamo "Lienzos Fantasmas", porque si no crees en fantasmas no los ves. Y así son ellas, como leyendas que nadie cree y que sin embargo existen. Allá en la imperfección, donde se puede brillar porque no hay otras luces que lo impidan.
Aunque también puede pasar que mi corazón de artista me auto-obligue a buscar la magia en los rasgos. Ya que en el arte visual como en el acústico, si saturas un trabajo acabas por dejarlo vacío, sin nada que apreciar.

Pero mas allá del debate de la perfección existe algo que considero mas importante, motivo además por el que aprecio los rasgos. Y es la naturaleza de las cosas hermosas, porque independientemente de los conceptos de belleza que se muestran en esta sociedad actual es aun mas importante darse cuenta de que toda esa perfección que se halla en una revista de ropa o en entrevistas de superestrellas no es mas que una atracción artificial. Con miles reparos en cirugía, medios digitales e ingenies selectivas.
Mientras que la Naturalidad, sola y menospreciada en una esquina, muere lentamente a manos de un mundo plastificado.

Para mi la belleza está en cada instante, puede durar un segundo o mas de cincuenta años. La puedes encontrar en cualquier parte, ya sea en el bus o en una gala. La belleza para mi es una atracción natural, sin modificaciones externas. Con defectos que hacen resaltar las virtudes, ya que en la oscuridad es donde mas resplandece la luz. Así que si alguien quiere lamer cuerpos de goma lo respetaré, pero no ignoren la complejidad de la Belleza, porque para mi es una simpleza.

1 comentario:

Natalia dijo...

Lienzos Fantasmas,muy bueno White-z!